La doctora del Hospital Paitilla, Débora Arosemena, señaló que la densitometría ósea es un examen que mide la cantidad calcio y otros minerales presentes en los huesos de una persona. Por ello, la densitometría ósea como diagnóstico de osteopenia y osteoporosis.

La densitometría ósea como diagnóstico

“Generalmente,  se hace en la columna lumbar y cadera, a veces el médico ordena cuerpo entero,  cuando considera necesario conocer la densidad ósea del paciente”. Explicó que las mujeres deben realizarse este tipo de examen a partir de los 35 a los 40 años de edad,  cuando la mujer tiene un nivel hormonal adecuado; ya que esta patología es mucho más frecuente en mujeres.

Cuando se presente la menopausia,  el médico determinará,  según el diagnóstico,  si se debe realizar cada año o cada dos años. La doctora sostuvo que los varones también pueden sufrir de osteopenia y osteoporosis.  Por ello, es recomendable que tanto mujeres como caballeros, se realicen el examen de densitometría ósea.  

La Osteopenia es una disminución en la densidad mineral ósea que puede ser una condición antecesora de la osteoporosis, ésta es una pérdida considerable de hueso, donde la integridad ósea se ve comprometida, lo que lleva a complicaciones como fracturas, sobre todo en caderas y la columna lumbar. Hay tres tipos de osteoporosis: Leve, moderada y severa. El médico de cabecera es quien determina si se debe realizar el estudio de densitometría ósea.

Pacientes que utilizan medicamentos y tienen algunas de las siguientes patologías, pueden ver afectada la densidad ósea de sus huesos:

• El uso de diuréticos.
• Hormona tiroidea.
• Corticoides.
• Menopausia.
• Enfermedad en los riñones.

Para realizarse una densitometría ósea no se requiere preparación del paciente y su duración máxima es de 15 minutos. La única contraindicación que tiene este estudio, es en cuanto a las mujeres embarazadas, quienes no deben realizarse este examen, ya que en este estado no deben someterse a radiaciones.

Recomendaciones para prevenir la osteoporosis:

• Comer saludable
• Tener presente en la dieta vitamina D y calcio, ya que son el apoyo para mantener la densidad ósea
• Evitar sodas
• Evitar cafeínas
• Realizar ejercicios
• Realizarse el examen de densitometría ósea